FINDE FANTASMA

Intramuros es el álbum debut de Finde Fantasma, un trabajo que se mueve entre la nostalgia y la modernidad, lo íntimo y lo expansivo. Su identidad visual debía reflejar estas dualidades, dando forma a un diseño de packaging con una estética atemporal, evocadora y con un aire de ensoñación.

La dirección artística establece un diálogo esencial con las fotografías de Vodkhail, que fusionan lo cotidiano con una sutil sensación de irrealidad. Esta combinación aporta una mirada cinematográfica y envolvente, construyendo un universo visual que no solo complementa la narrativa del álbum, sino que la expande, invitando a sumergirse en su atmósfera.

CREONTE

La identidad visual de Obra y Danza se articula a través de una estética rugosa, cruda y visceral, en sintonía con la intensidad emocional del álbum. Predominan las texturas desgastadas, los óxidos y la materia en descomposición, evocando un tiempo detenido, marcado por cicatrices visibles y una transformación constante.

Las pinturas de Lidia Guerrero refuerzan esta idea, donde el desgaste y la belleza coexisten en un equilibrio tenso. Los tonos terrosos, el rojo profundo y las manchas de negro y gris componen un lenguaje visual que remite a la lucha, la resistencia y la fragilidad humana, elementos esenciales en la narrativa lírica del disco.